El piloto oficial del equipo Renault F1, Romain Grosjean se divierte a bordo del Renault Megane RS en el infierno verde, Nürburgring.
A pesar de la alta velocidad a la que circula el piloto, vemos la tranquilidad con la que ejecuta cada cambio de marcha o giro de volante.
Los 250 cv de potencia y 340 nm de par de su motor turbo 2.0 litros rugen dando lo mejor de si mismos.